(1)La catalogación y el estudio del patrimonio etnográfico es, sin duda, una tarea necesaria y fundamental. Especialmente en lo relativo a la cultura inmaterial, ya que debido a su propia esencia, es la más susceptible de perderse (2). Uno de sus capítulos principales es la tradición oral y, dentro de ella, el estudio del Romancero. Su investigación ha sido abordada desde diversas perspectivas y evolución (3). A pesar de que el primer texto romancístico que se conoce en la Península Ibérica hasta el momento data de 1421 (4), habrá que esperar casi dos siglos, con el desarrollo de las disciplinas científicas, para que el estudio del Romancero de tradición oral en la Península sea una realidad irrefutable. Dos siglos más para el comienzo del estudio del Romancero de tradición oral en Cantabria. Y a la segunda década del siglo XX para la recogida de los primeros textos romancísticos en tierras campurrianas.
El Realismo costumbrista español del último tercio del siglo XIX, como cualquier otro movimiento literario, aporta a la Historia de la Literatura Española un conjunto de nombres sobradamente reconocidos.
Su más significado referente, José María de Pereda, se consolida como uno de los escritores representativos del siglo y obligado es reconocer su participación en el nacimiento de la novela realista y regionalista decimonónica, con un papel muy destacado en la recreación del paisaje de Cantabria. Muchos de los textos seleccionados para el presente estudio huelen a Pereda y su estilo tan característico y significativo.
En mi labor de campo a la búsqueda de información relacionada con la textilería tradicional de Cantabria, he hallado algunos utensilios que, si bien no totalmente desconocidos, llamaron mi atención por su relativa originalidad. De ellos, aquel cuyo tipo es documentalmente más conocido, dentro de su rareza, apareció en el Valle de Ruesga, pero los testimonios de utilización de los más singulares los encontré en el ámbito de la antigua Merindad de Campoo.
Con el presente estudio mostraré la situación precisa del llamado Frente Norte, constituido a raíz del levantamiento militar contra el gobierno de la República de 1936. Me limito a un sector central del mismo, acorde con las pretensiones geográficas de Cuadernos de Campoo, coincidente con el sur de la Comunidad autónoma de Cantabria. La reacción defensiva contra los sublevados de fuera, una vez que no triunfaron los de dentro, consistió en un laboreo de trincheras con que se clavaron al terreno allí donde lo veían ventajoso, o donde las circunstancias lo permitieron. Localizar una a una ha sido nuestra labor, así de un bando como del otro.
Javier López Gutiérrez, Isabel María Fernández González, Raquel Gutiérrez Sebastián
INTRODUCCIÓN
De todas las muestras de literatura que se han centrado en nuestra comarca o que se han originado en ella, vamos a detenernos hoy en un texto clásico, Peñas arriba, de José María de Pereda. Tomando como excusa el grado de realismo presente en las descripciones de los paseos de los personajes de la novela por la comarca de Campoo, aspecto que ha suscitado una cierta polémica en la crítica perediana, nos detendremos en el análisis de los itinerarios inspirados en esta comarca que aparecen en la obra cumbre del polanquino.
No es éste el lugar para esbozar un estudio exhaustivo de historia local, especialmente si se pretende dar una visión global de todos los aspectos que configuraron la vida de una institución tan determinante como lo fue la Iglesia en los siglos XVI a XVIII en toda la Corona de Castilla, en general, y en la zona campurriana particularmente. Hemos subtitulado estas notas intencionadamente como "apuntes para una interpretación" por considerar que es lo más valioso que podemos ofrecer en estas circunstancias: no se trata de presentar meros datos, o curiosidades sobre una comarca determinada en los siglos del pasado, sino más bien de utilizar los mismos para entender, inductivamente, las realidades generales a partir de las concretas.
Este artículo es continuación del publicado con el mismo título en el nº 41 de estos Cuadernos de Campoo
RÍAÑO
Existen varias poblaciones con el nombre de RIAÑO en Cantabria (Santillana, Solórzano, Escalante, Mazcuerras) y en las provincias vecinas, siendo el Riaño de León el mejor documentado: figura como Rianclo (ultracorrección en lugar de *Rianglo) y Riángulo en el s. XI. Estas formas ponen de manifiesto la etimología: latín Ri (v) i-ángulus = ángulo del río. Efectivamente, el antiguo Riaño leonés, ahora inundado por el embalse de su nombre, estaba situado en la cofluencia de los dos brazos que forman el río Esla; es decir, en el ángulo del río.
Cuando me pidieron hablar de D. Ángel de los Ríos, me preguntaba cómo un hombre que murió hace 107 años está todavía en la memoria de muchos campurrianos y montañeses, encontrando tres condicionantes que han contribuido a este recuerdo. El primero, la novela "Peñas Arriba" donde D. José María de Pereda le retrató magistralmente como el "Sordo de Provedaño"; el segundo condicionante es su cultura y erudición, y el tercero, sobre todo en los campurrianos, su carácter.
Es difícil y me ha sido prácticamente imposible describir el carácter de Ángel, ya que he encontrado tantas contradicciones en su vida, que no sé cuál aspecto de su carácter prevalece. Serio, adusto, sensible, muy sensible, gran amigo de sus escasos amigos, siempre preocupado de servir a su país, pero con gran genio ante lo que él consideraba injusticias. En resumen, yo diría que fue un hombre bueno, esencialmente bueno, con un pronto o genio terriblemente duro.
Fotografías de junio 2010. Campo de Golf de Nestares. 18 excelentes hoyos en plena naturaleza. Tienes que tener tiempo, dinero(no mucho) y que te guste. Añadimos unas fotos en febrero y abril 2011. Mas en 2012.
Dichos: Que verde era mi valle, antes de la sequía.
Comentarios recientes