Apuntes para una Biografía de D. José Calderón Escalada, "El Duende de Campoo", en el Centenario de su Nacimiento

Carlos Javier Calderón Ortiz

"Corría el año de 1899 cuando sonó en el reloj de los destinos eternos la hora de que viniera al mundo este mísero mortal y se inscribiese con todas las de la ley en el inmenso padrón de la Humanidad..."
Así comienzan las notas biográficas que "El Duende de Campoo" escribiera, casi con toda seguridad en el año 1924, a punto de terminar su carrera eclesiástica, y que recogen sus 25 primeros años de vida, bajo el título COSAS MÍAS. DE RETAZOS Y A PUNTADAS.
Nació D. José Calderón Escalada, efectivamente, el 13 de Enero de 1899, en Mazandrero (Campo de Suso), "...de padres humildes que, desde mis primeros años, me enseñaron a ganar el pan duro de cada día...", siendo el mayor de ocho hermanos, todos varones.
Casa natal de "El Duende de Campoo"Con trece años ingresa en la Preceptoría de Fresno del Río para cursar 1º de Latín, iniciando así la carrera sacerdotal, que concluiría en el Seminario de Burgos. No debió de pasarlas muy bien en dicha Preceptoría, a juzgar por lo que relata en sus Notas:
"...un joven e ilustrado sacerdote , encargado de una parroquia no lejos de mi pueblo, tomó sobre sus hombros el duro trabajo de iniciarme en los primeros rudimentos de la lengua latina, empleando para ello el anticuado y detestable método fundado en el falsísimo principio pedagógico de que la letra con sangre entra, con que los Dómines de hace un siglo atolondraban a sus discípulos en vez de enseñarles a discurrir..."
Sea como fuere, en 1913 ingresa en el Seminario de Burgos con una beca, que conserva hasta el final de su carrera. Pero, a poco de ingresar, le sobreviene una congestión pulmonar que le tiene en cama más de dos meses y, que, sometido a una dolorosa operación de pleura, le deja secuelas de por vida.
Pasada la enfermedad que le tiene a las puertas de la muerte, prosigue sus estudios en el Seminario. Es allí donde a sus dieciséis o diecisiete años comienza a dar sus primeros pasos en la literatura, sin definir aún sus preferencias: "Esta vocación se me despertó en el Seminario desde muy joven, un poco empujado por el consejo de algunos superiores y el aplauso inmerecido de los primeros que me leyeron, y un mucho cohibido por el ceño de los que opinaban que no era más que una manera muy bonita de perder el tiempo".
Del año 1917 son algunos poemas, en principio en forma de romance, utilizando posteriormente otras rimas y métricas; aunque, hay que decir que su producción poética nunca fue abundante: solo se conservan unos 50 poemas que abarcan toda su vida literaria, desde la adolescencia hasta su muerte. Hace también por esos años descripciones en prosa de su tierra. Tanto unos como otras permanecen inéditos.
A partir de este año comienza a colaborar con El Diario Montañés, publicando artículos costumbristas, con apariciones semanales (a veces dos a la semana), y es entonces cuando adopta el seudónimo de El Duende de Campoo, por el que es recordado, y que, gran tímido, confiesa deberse en un principio al intento de ocultar su verdadera identidad.
En 1918 inicia sus trabajos literarios dedicados al teatro, en forma de monólogos, ensayos y juguetes cómicos, el primero de la serie un monólogo en un acto y en prosa titulado LA PIPA DE MI ABUELO. Ya en 1919 firma otro monólogo, también en un solo acto, que titula MI CUCO ES TAN CUCO. En este mismo año escribe un drama, bajo el título EL NIÑO DESAMPARADO y un cuadro cómico-dramático para representar por niños: ESPAÑA MARIANA.
José Calderón con su hermano pequeño ConstantinoMás abundante es su producción literaria de 1920, muy volcada también hacia el teatro. Solo en el mes de Mayo firma cuatro obritas, de distinto estilo: los monólogos LA HUERFANITA y LA OFRENDA DE UNA POBRE, siempre en un solo acto, y los diálogos PERDÓN Y ARREPENTIMIENTO y LA PARTIDA, que tienen todos en común, como sus títulos no esconden, su espíritu moralizante.
En ese mismo año escribe un juguete cómico en dos actos titulado LOS PREMIOS DE LA ESCUELA y la novela sentimental BIENAVENTURADOS LOS QUE LLORAN, también de contenido moralizante, como todas las obras de su etapa juvenil, y la primera de alguna extensión.
Todas estas producciones se hallan inéditas. En realidad lo está toda su producción anterior a 1945, fecha en que aparecen sus ESTAMPAS CAMPURRIANAS, quizá una de sus obras más conocidas y recordadas.
En el año 1921, bien arraigada ya la vocación literaria (vocación que no le abandonaría nunca), firma los diálogos DOCTOR PATILLAS, ALMA EN PENA y BIENAVENTURADOS LOS QUE SUFREN, y los dramas en dos actos LA LOCURA DE UN PADRE y LA CONVERSIÓN DE UNA MORA.
Continuando con su afición al teatro, compone en 1922 un juguete cómico que titula Y TÚ, ¿POR QUÉ NO TE METES, JUAN?.
Pronto cambia su inclinación hacia la literatura de costumbres. Comienza a prodigarse en narraciones y semblanzas, generalmente sobre temas de la tierra que le vio nacer y que tan bien conoce.
A punto de terminar su carrera eclesiástica, deja la pluma por algún tiempo. Se ordena sacerdote en Julio de 1924. Canta su primera misa en su pueblo natal, Mazandrero, en la parroquia de S. Lorenzo, y, un mes más tarde, es nombrado cura ecónomo de Suano, permaneciendo en el cargo hasta Diciembre de 1925, fecha en que es nombrado párroco por concurso de La Hoz de Abiada.
Durante su estancia en Suano, conoce y trata a Manuel Salces, "el pintor de Suano", con quien entabla amistad y que sin duda influyó en sus aficiones pictóricas, puestas de manifiesto por aquellas épocas y abandonadas después. Se conservan algunas acuarelas y un buen número de apuntes a lápiz. Es en Suano también cuando comienzan sus investigaciones arqueológicas.
Estando ya en La Hoz, conoce a un personaje que, con toda seguridad, va a ser clave en alguna de sus producciones posteriores. Este personaje, veraneante en La Lomba, es el Coronel de Estado Mayor retirado D. Manuel G. De Simancas, preceptor del Infante D. Jaime de Borbón, hijo de Alfonso XIII. Este coronel, que se entretenía paseando con El Duende y sus compañeros sacerdotes de los pueblos colindantes, prestaba gran atención a las costumbres y modos de hablar de los aldeanos, anotando en una libreta todas las palabras que no entendía o le sonaban extrañas, para que D. José le explicase su significado. De ahí viene la afición de El Duende de Campoo por recopilar y estudiar el lenguaje popular.
Sin olvidar sus colaboraciones con la prensa (Diario Montañés, Alerta, La Hoja del Lunes, incluso revistas americanas), ensaya nuevas disciplinas literarias, y, así, en 1931 escribe la novela de ambiente costumbrista LOS AMORES DE TOÑUCA, con diálogos ya en el más puro estilo campurriano.
El comienzo de la Guerra Civil le sorprende en Madrid, de vacaciones. Allí se queda durante un tiempo, como dependiente en el comercio de unos familiares. Pero, en la primavera de 1937, cosas de la guerra, le encontramos en la Cárcel Modelo, donde permanece hasta finales de 1938. Después de un corto período de tiempo es movilizado y llevado al frente en la sierra de Madrid, donde está hasta el final de la contienda. Pasada la pesadilla de la Guerra, regresa por fin a su querida tierra campurriana, haciéndose nuevamente cargo de la parroquia de la Hoz de Abiada.
En 1941 es nombrado regente de la parroquia de Polientes y de las próximas de Campo de Ebro y Quintanilla de An. Allí, en Valderredible no dedica mucho tiempo a la literatura, aunque sigue con sus colaboraciones en la prensa y, sobre todo, continúa con sus investigaciones arqueológicas, tarea fácil por la abundancia de yacimientos que acumula el Valle.
Un año más tarde le vemos como Coadjutor de la parroquia de Reinosa, estableciéndose en la ciudad de forma definitiva, hasta que en 1965 es nombrado Capellán-Administrador de la "Residencia de Ancianos de S. Francisco".
En Reinosa alterna sus distintas ocupaciones como enseñante y como sacerdote con la literatura y va preparando mediante la selección de los escritos aparecidos en la prensa la publicación de ESTAMPAS CAMPURRIANAS, su primer libro impreso, como creemos haber dicho, que sale en 1945, con prólogo del entonces director de El Diario Montañés D. Manuel González Hoyos, y cuyo éxito fue rotundo, como resaltan las reseñas de los periódicos de la época. Mientras se realiza y sale a luz esta primera edición de las ESTAMPAS, escribe la comedia de costumbres campurrianas YA NO VA LA SINDA POR AGUA A LA FUENTE, de la que hace más tarde una segunda versión, que fue estrenada con éxito. También estrena ese año las comedias en tres actos LUZ EN LA SOMBRA y Y EL TRIGO ESTÁ EN EL GRANERO.
José Calderón Escalada  "El Duende de Campoo"Con fecha de Junio de 1946 remite a la Real Academia de la Lengua un listado de unas cuatrocientas voces de uso corriente en Campoo, no recogidas en el Diccionario, ordenadas y alfabetizadas, con sus respectivas acepciones. Todas fueron aceptadas por la Academia, excepto tres que ya estaban recogidas. Este trabajo, cuyo larguísimo título es VOCES, EN SU MAYOR PARTE NOMBRES DE COSAS, DE USO CORRIENTE EN ESTOS VALLES ALTOS DE LA PROVINCIA DE SANTANDER, QUE NO ESTÁN RECOGIDOS EN EL DICCIONARIO DE LA LENGUA ESPAÑOLA, aparece publicado en el Boletín de la Real Academia en el número correspondiente a Septiembre-Diciembre de 1946, ocupando las páginas 379-397 y de él se hizo la correspondiente separata. El estímulo que la buena acogida de la Academia le produce, dio sus frutos, pues, en otras ocasiones hizo envíos de trabajos similares, con acogida igualmente favorable. Con todos estos envíos, más otras muchas voces recopiladas posteriormente, hasta llegar a más de 1.500, compone un tomo titulado LEGUAJE POPULAR DE LA MERINDAD DE CAMPOO, que incluye un Estudio Preliminar, el Vocabulario propiamente dicho, Voces Toponímicas, Refranero y Manifestaciones Folklóricas de Campoo. Aquí recoge costumbres como "El Aguinaldo", "Santa Brígida", "Santa Bárbara", "El Antruido", "Las Marzas", "Peleas de Toros", "Salidas a Puerto", "Los Campanos", "Las Natas", "Las Hilas", "El Relincho y el Silbido", etc. Este libro nunca se editó, sino en edición muy restringida. Va prologado por D. Julio Montes Sáiz.
Con motivo de sus bodas de plata sacerdotales se le ofrece un homenaje, que consiste, especialmente, en sufragar las gastos de la edición de sus obras más significativas: POR LOS SENDEROS DE MI VALLE", recopilación de artículos de la prensa y POR UN PORTILLU, novela de costumbres. Con el mismo motivo se publican varios artículos en la prensa regional, entre otros uno firmado por D. Ramón Rodríguez Cantón (que también prologa alguno de sus libros), en el que hace un repaso de la vida del Duende, incluyendo anécdotas vividas en su compañía.
En 1950 sale a la luz una nueva novela, titulada CUANDO YO SEA RICO, que en principio se llamó UNOS OJOS DE FELINO, con argumento y situaciones netamente campurrianas, como no podía ser menos. Con el mismo asunto de esta novela compuso la comedia en tres actos LUZ EN LA SOMBRA, estrenada en Reinosa. Se publica además, en fascículos, en la revista Alción, otra novela titulada FIRME A TODA PRUEBA, donde narra una historia real que la propia protagonista le contó.
En 1952 publica MONTE ARRIBA Y MONTE ABAJO, novela sobre la trashumancia. Al mismo tiempo se está publicando en la Hoja Parroquial de Reinosa, y en pequeños capítulos, otra novela, que no tardaría en salir a la luz, titulada REMIGIO, una de las más celebradas del autor y en la que nos cuenta la aperreada vida de un pícaro trotamundos, cuyo oficio es ser "pobre de los de pedir" y trabajar lo menos posible.
En esta década de los 50 dedica más atención a la investigación etnográfica y la arqueología, según se deduce de sus apuntes y notas. También dedica parte de su tiempo a la investigación histórica. En 1956 es nombrado miembro de la Junta de Trabajo de la Casa de Cultura "Sánchez Díaz" de Reinosa, permaneciendo en el cargo hasta su muerte. Este mismo año nace la revista Fontibre, de no muy larga vida, ya que duró hasta 1963, pero donde D. José Calderón publica algunos de sus mejores escritos, sobre todo de contenido histórico o de folklore.
En 1965 es nombrado Capellán-Administrador de la Residencia de Ancianos S. Francisco. Al poco tiempo, por razones de edad, es jubilado como profesor del Instituto Nuestra Señora de Montesclaros, con lo que dispone de mucho más tiempo para sus investigaciones sobre historia, folklore y costumbres campurrianas. Por cierto que, si hemos de creerle, su principal vocación, incluso por delante de la literaria, era la enseñanza, así al menos lo deja escrito. Justo es, entonces, que haya en Reinosa, como así sucede, un colegio que lleva su nombre, además de una calle.
Al mismo tiempo que escribe una nueva novela, A LA SOMBRA DEL ABUELO, va ordenando, seleccionando y contrastando datos para la publicación del que muchos consideran su mejor libro: CAMPOO. PANORAMA HISTÓRICO Y ETNOGRÁFICO DE UN VALLE, que publica la Institución Cultural de Cantabria en 1971, a instancias de su Secretario, D. Joaquín González Echegaray, institución de la cual era miembro El Duende de Campoo desde 1968.
D. José Calderón Escalada, El Duende de Campoo, fallece el 13 de Marzo de 1972, dejando algunas obras inconclusas y un buen número de ellas que jamás se editaron. De entre estas, y como modesto homenaje, damos aquí un amplio extracto del Estudio Preliminar del LENGUAJE POPULAR DE LA MERINDAD DE CAMPOO